Miel en polvo, un producto sencillo y revolucionario
La miel en polvo proporciona todo el aroma, sabor y beneficios de la miel en una forma práctica y fácil de usar. Es una alternativa saludable al azúcar, perfecta para usos industriales, que puede ser utilizada en diversos productos, como panificados, productos lácteos, aderezos, chocolates, etc.
Al igual que en su forma líquida, la miel en polvo sirve como edulcorante, aromatizante o humectante, pero con una ventaja fundamental: su consistencia es mucho más fácil de ser utilizada en procesos industriales, algo importante a la hora buscar eficiencia productiva reduciendo mermas, tiempos y estabilidad microbiológica.
Además de ser incorporada dentro de varios alimentos, también es perfecta para espolvorear sobre cereales, helados o frutos secos, y hasta se puede utilizar en bebidas calientes o frías, como café, té, limonadas o licuados de frutas.
La miel en polvo un alimento completo
La miel contiene importantes nutrientes para la nutrición humana. Los minerales más frecuentes en la miel son calcio, cobre, hierro, magnesio, manganeso, zinc, fósforo y potasio. Están presentes también alrededor de la mitad de los aminoácidos existentes, ácidos orgánicos (ácido acético, ácido cítrico, entre otros) y vitaminas del complejo B, vitamina C, D y E.
La miel posee también una variedad considerable de antioxidantes (flavonoides y fenólicos) y capacidad de proteger contra varias enfermedades.
Para aumentar los efectos positivos de la miel, los especialistas recomiendan ingerir miel todos los días. En ese sentido, la miel en polvo cuenta con la ventaja de poder incorporarse a más alimentos y de forma más sencilla que la miel líquida.
Su aspecto es un polvo fino color blanquecino, similar a una harina de trigo con humedad menor al 5%, lo cual permite su uso en aplicaciones de humedad controlada, como productos de repostería, chocolates y todo tipo de golosinas.
Otras ventajas de la miel en polvo
Regula el azúcar en la sangre: Parece contrario a la intuición que la miel regula el azúcar en la sangre. Pero el secreto de su capacidad para hacerlo está en la balanza de fructosa y glucosa.
Así mismo si se consume miel, la porción de fructosa permite que la glucosa sea captada por el hígado para formar glucógeno, que pasa a estar disponible para el cerebro, el corazón, los riñones y las células rojas de la sangre.
Esto mejora el funcionamiento de los órganos y tejidos esenciales, eliminando la glucosa de la circulación y por tanto, reduciendo el azúcar en la sangre.
Reduce el estrés metabólico: El estrés emocional, psicológico o fisiológico se traduce en el cuerpo como estrés metabólico. Ocurre cuando el cerebro piensa que está en peligro de quedarse sin combustible: por ejemplo, al ejercitarse o durante el sueño nocturno.
Promueve la recuperación del sueño: El azúcar natural que contiene la miel produce una ligera secreción de insulina, lo que permite la secreción de melatonina, una hormona vital para la regulación diaria del sueño y vigilia.
La miel en polvo es más que una alternativa a la miel convencional: es un paso adelante, una mejora que permite una fácil manipulación, realizar productos innovadores, a un precio competitivo.